Seguramente conoceréis la historia de la saga ‘Final Fantasy’, un título que haciendo honor a su nombre se convirtió en la última apuesta de Square para salir de una aparentemente inevitble bancarrota allá por 1987. Pues bien, parece que el tan esperado remake de esa joya llamada ‘Final Fantasy VII’ apunta a convertirse en su siguiente as en la manga para salir de una posible futura bancarrota, ya que no sólo no se plantean hacerlo sino que además lo ideal para ellos sería saltar a una siguiente entrega llamada ‘Final Fantasy VII-2’.

Los usuarios piden a gritos un remake de ‘Final Fantasy VII’, apoyando su propuesta en que no sería un título extremadamente caro debido a la existencia de un guión y unos personajes ya establecidos. Además consideran que el riesgo sería nimio, ya que los fans se tirarían de cabeza a comprarlo aunque, como se teme desde Square Enix, el juego finalmente no hiciese honor a la obra original.

Sus planes no pasan por seguir la retomar la saga desde ese punto, pero tampoco descartan la posibilidad de crear una secuela de la aventura de Cloud y compañía. Así lo explica Yoshinori Kitase, quien no oculta su emoción al plantearse dicha posibilidad:

“Sería un título de un enorme presupuesto. Llevaría mucho tiempo y una enorme cantidad de dinero hacerlo. Nos interesaría darle una oportunidad, pero obviamente tendríamos que estudiarlo, reunir al mejor equipo posible, y ver la situación actual del mercado para ver si sería el momento oportuno para nosotros. En este momento no tenemos planes, pero podríamos hacerlo.“

Las manos quietas, por favor. Tal y como está el panorama en el desarrollo japonés y con la vista puesta en las algunas barbaridades perpetradas por Square Enix, yo me paso al bando de los que opinan que mejor dejar ‘Final Fantasy VII’ tal y como está, para no mancharlo de forma sucia e interesada buscando una fuente de ingresos fáciles. Pero es que menos aún me imagino una posible secuela, teniendo en cuenta que la historia está más que cerrada y que el despropósito generado podría manchar para siempre el nombre de la compañía y de la mítica joya de PSX.