Espeluznante llegar a las puertas del infierno, pero ahí nos encontramos. Nos situamos en el desierto de Turkmenistán, donde un pozo de gas abandonado en los años 50 por los soviéticos, con sus 60 metros de diámetro y 20 metros de profundidad, constituye sin duda uno de los lugares más apocalípticos del planeta.

Desde entonces no ha dejado de arder, y nadie sabe a ciencia cierta cuándo se apagará, pero lo más probable es que el pozo de Darvaza siga ardiendo durante décadas. Sin duda un lugar misterioso para los más aventureros. ¿No te animas? Mira en el vídeo la experiencia de estos viajeros, es alucinante.

impresionante, me encanta

Es un misterio.

Desde luego parece la mismísima puerta del infierno